El presidente Barack Obama pidió el sábado a los estadounidenses que ayuden a difundir los nuevos mercados de contratación del seguro médico.
De acuerdo con la agencia de noticias AP, esos mercados o bolsas comenzarán a funcionar el martes y fueron creados por la ley de la salud de Obama. En su alocución radial semanal y por internet, Obama dijo que los estadounidenses podrán comparar las alternativas en la adquisición de un seguro médico de la misma forma que harían al comprar un televisor o un boleto de avión.
Muchas personas, agregó, verán precios más baratos y podrán recibir subvenciones fiscales.
Según Obama es preocupante que los republicanos quieran paralizar el gobierno si no es abolida la ley. Agregó que, de cualquier caso, esos mercados abrirán el martes.
En la respuesta republicana, la representante Cathy McMorris Rodgers dijo que el presidente desea la solución más fácil elevando el tope del endeudamiento federal sin reducir el gasto público. Agregó que es una "oportunidad dorada" para arreglar los problemas que vienen de Washington.
Obama amenaza con vetar ley
Durante el debate en el Congreso, los representantes republicanos exigieron el sábado retrasar un año partes de la ley de reforma de los servicios médicos promovida por el mandatario y eliminar completamente un impuesto a los dispositivos médicos, a cambio de evitar una paralización parcial de las operaciones del gobierno, que comenzaría el martes, según señala la agencia de noticias DPA.
La Casa Blanca amenazó de inmediato con un veto, incluso antes que la Cámara comience a debatir la medida. "Cualquier miembro del Partido Republicano que vote por este proyecto de ley está aprobando un cese de las operaciones del gobierno", dijo el secretario de Prensa de la Casa Blanca, Jay Carney, en una declaración.
Rechazaron un proyecto de ley aprobado el viernes en la cámara alta que permitiría que el gobierno opere 45 días más sin que la ley de salud sufra cambios. En lugar de ello, los representantes republicanos se preparaban para aprobar su propia versión el sábado y devolverle el asunto al Senado, que no volverá a sesionar sino hasta el lunes por la tarde, 10 horas antes de que venza el plazo para la suspensión de las operaciones del gobierno.