Una de las representantes de la CIDH atiende a denunciantes.
SANTO DOMINGO. En el primer día de trabajo de los miembros de la delegación de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), se recibieron 150 casos de testimonios, peticiones y denuncias de descendientes de haitianos que se sienten afectados por la sentencia sobre la nacionalidad emitida por el Tribunal Constitucional dominicano, en el inicio de un proceso que estuvo salpicado por manifestaciones, hermetismo y tensión, y que conllevó, además, reuniones con autoridades en el Palacio Nacional y la Cancillería dominicana.
La agenda oficial de la delegación internacional comenzó con una reunión con el ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo, en la que, además, participaron el vicecanciller y canciller en funciones, José Manuel Trullols; así como Luis Henry Molina, viceministro de la Presidencia y Luis Vargas y Josué Fiallo, asesores del ministro Montalvo.
La misión de alto nivel de la CIDH estuvo encabezada por su presidente, José de Jesús Orozco, de México, y los miembros Rosa María Ortiz, de Paraguay; Dinah Shelton, de Estados Unidos; Emilio Álvarez Icaza, de México; Catalina Botero Inelda González; Álvaro Botero, de Colombia; Sofía Galván, de México; Elizabeth Abi-Mershed, de Estados Unidos; Rose-Marie Belle, de Trinidad y Tobago; Felipe González, de Chile, y Tracy Robinson, de Jamaica.
El encuentro se inició a las 9:30 a.m. y concluyó una hora después, para de inmediato trasladarse al Ministerio de Relaciones Exteriores, donde sostuvieron otra reunión, a la que, al igual a la del Palacio Nacional no tuvo acceso la prensa.
En la sede de la Cancillería se produjo un diálogo entre los miembros de la CIDH, en el que participaron, además del vicecanciller Trullos, el ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, y el director de Migración, José Ricardo Taveras. La agenda también establecía un representante de la Junta Central Electoral. Texto Completo en Diario libre