WASHIGTON.- El director nacional de inteligencia de Estados Unidos (DNI), James Clapper, ha negado las denuncias del diario francés Le Monde, quien acusó a Washington de haber interceptado y espiado más de 70 millones de llamadas telefónicas en Francia.
En un comunicado de la DNI que difunden medios estadounidenses, Clapper asegura que “los artículos publicados recientemente por el periódico francés Le Monde contienen información inexacta y engañosa respecto a las actividades de los servicios de inteligencia exterior de Estados Unidos”.
Añade que su país recoge información de inteligencia pero de una forma similar a la que recopilan el resto de naciones del mundo.
“Le Monde” publicó el lunes nuevas informaciones sobre el carácter “masivo” del espionaje de EEUU a Francia, con más de 70 millones de comunicaciones interceptadas en 30 días entre fines de 2012 y comienzos de 2013.
Esas alegaciones provocaron que el embajador estadounidense en Francia fuera convocado inmediatamente en el Ministerio de Exteriores en París.
En una primera reacción, Francia reiteró a Washington que consideraba “totalmente inaceptable” el espionaje al que fueron sometidas decenas de millones de comunicaciones en el país y reclamó “una respuesta tangible” y rápida que demuestre que esas prácticas han terminado.
Además, la publicación de esas presuntas escuchas coincidió con la visita del secretario de Estado norteamericano, John Kerry, a Francia, donde ayer celebró un encuentro con el ministro de Exteriores, Laurent Fabius, en el que hablaron de este espinoso tema.
Ayer también, el presidente francés, François Hollande, pidió que la cuestión del espionaje de Estados Unidos a Francia y el resto de sus aliados europeos, se incluyera en la agenda del Consejo Europeo que se celebra el jueves y el viernes.
“Es a la vez una cuestión nacional y europea”, señaló el primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, para justificar que este contencioso sea abordado por los jefes de Estado y de Gobierno de la UE.
Ayrault, que intervino en la sesión de control a su Ejecutivo en la Asamblea Nacional, insistió en que “tenemos que protegernos, tenemos que exigir que haya nuevas reglas” y eso pasa por un diálogo “sereno y firme” con Estados Unidos.