CIUDAD DEL VATICANO.- El nuncio apostólico en Caracas, Aldo Giordano, es quien "sigue" la situación en Venezuela, según la Santa Sede, que se mostró hoy dispuesta a "ayudar", pero sin contestar expresamente a la invitación del Gobierno venezolano para que participe en el diálogo con la oposición.
El portavoz vaticano, Federico Lombardi, declaró a Efe no tener "nada que decir" a propósito de la invitación que la cancillería venezolana difundió ayer para que el papa Francisco "participe en los procesos de diálogo" entre Gobierno y oposición en ese país.
Lombardi agregó que "normalmente" es el representante del Vaticano, en este caso el arzobispo italiano Giordano, el que se ocupa de seguir los acontecimientos y que la Santa Sede está "atenta", al ser preguntado por la situación en Venezuela.
El miércoles las autoridades venezolanas invitaron al secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, a participar como "testigo de buena fe" en el diálogo entre Gobierno y oposición para buscar una salida a la situación de violencia y enfrentamientos que vive el país desde hace semanas.
"Deseamos transmitir la invitación del Presidente Nicolás Maduro Moros a Su Santidad el Papa Francisco, con el propósito de que participe en los procesos de diálogo (...) a través de la designación de su persona como 'Testigo de Buena Fe'", indicó la Cancillería venezolana en una carta en su página web.
Parolin fue nuncio vaticano en Venezuela desde 2009 hasta agosto pasado, cuando Francisco lo nombró secretario de Estado de la Santa Sede.
En la carta difundida por su ministerio, el jefe de la diplomacia venezolana, Elías Jaua, manifiesta su esperanza de contar con la participación de Parolin en el desarrollo de la Conferencia de Paz que tiene como objetivo "promover el diálogo constructivo, el entendimiento y la paz".
La Conferencia Episcopal de Venezuela había indicado el martes que el Vaticano no había recibido una solicitud formal para participar en estas conversaciones.
Venezuela vive desde el pasado 12 de febrero una ola de protestas antigubernamentales que en ocasiones se han tornado violentas, y que a día de hoy han dejado 39 muertos, cientos de heridos y detenidos.
El portavoz vaticano, Federico Lombardi, declaró a Efe no tener "nada que decir" a propósito de la invitación que la cancillería venezolana difundió ayer para que el papa Francisco "participe en los procesos de diálogo" entre Gobierno y oposición en ese país.
Lombardi agregó que "normalmente" es el representante del Vaticano, en este caso el arzobispo italiano Giordano, el que se ocupa de seguir los acontecimientos y que la Santa Sede está "atenta", al ser preguntado por la situación en Venezuela.
El miércoles las autoridades venezolanas invitaron al secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, a participar como "testigo de buena fe" en el diálogo entre Gobierno y oposición para buscar una salida a la situación de violencia y enfrentamientos que vive el país desde hace semanas.
"Deseamos transmitir la invitación del Presidente Nicolás Maduro Moros a Su Santidad el Papa Francisco, con el propósito de que participe en los procesos de diálogo (...) a través de la designación de su persona como 'Testigo de Buena Fe'", indicó la Cancillería venezolana en una carta en su página web.
Parolin fue nuncio vaticano en Venezuela desde 2009 hasta agosto pasado, cuando Francisco lo nombró secretario de Estado de la Santa Sede.
En la carta difundida por su ministerio, el jefe de la diplomacia venezolana, Elías Jaua, manifiesta su esperanza de contar con la participación de Parolin en el desarrollo de la Conferencia de Paz que tiene como objetivo "promover el diálogo constructivo, el entendimiento y la paz".
La Conferencia Episcopal de Venezuela había indicado el martes que el Vaticano no había recibido una solicitud formal para participar en estas conversaciones.
Venezuela vive desde el pasado 12 de febrero una ola de protestas antigubernamentales que en ocasiones se han tornado violentas, y que a día de hoy han dejado 39 muertos, cientos de heridos y detenidos.