MOSCÚ, Rusia.- El ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, se mostró hoy optimista sobre un arreglo pacífico del conflicto en Siria, antes de viajar a Ginebra para reunirse con su homólogo de EEUU, John Kerry.
“Aún queda una oportunidad para la paz en Siria”, afirmó Lavrov en Asataná, la capital de Kazajistán.
El ministro reiteró que Moscú saluda la disposición de Damasco a someter su arsenal químico al control internacional para evitar un ataque militar contra Siria.
“Hemos saludado que las autoridades sirias están de acuerdo con nuestra propuesta de establecer un control sobre los arsenales de armas químicas en ese país, su posterior destrucción y la integración de Siria en la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ)”, afirmó, en una conferencia ante estudiantes de la Universidad Nacional Euroasiática en Astaná.
Antes, el canciller ruso dijo a los periodistas que no excluye que él y Kerry se reúnan en Ginebra con Lajdar Brahimi, el representante del secretario general de la ONU para Siria.
“Teniendo en cuenta que Brahimi y su equipo están basados en Ginebra, no excluimos la posibilidad de que se celebre una reunión tripartita, de modo que además de hablar del problema químico, que es la prioridad ahora, podamos hablar también de las perspectivas de (la conferencia internacional de paz) de Ginebra-2″, afirmó Lavrov.
“John Kerry y yo estamos de acuerdo en que sería equivocado no aprovechar nuestra reunión en Ginebra para abordar los preparativos de Ginebra-2″, afirmó el ministro ruso.