WASHINGTON.-- El presidente Barack Obama allanó el camino el lunes para que Estados Unidos envíe asistencia relacionada con armas químicas a la oposición siria, así como a organizaciones internacionales que trabajan en esta nación de Oriente Medio destrozada por la guerra.
La medida fue adoptada casi un mes después de que un mortal ataque con armas químicas cerca de Damasco aumentara la posibilidad de una represalia militar estadounidense y derivara en un acuerdo diplomático para retirarle a Siria sus arsenales de gases mortíferos.
Aunque la Casa Blanca afirma que una respuesta internacional debería disuadir futuros ataques, la autorización de la asistencia relacionada con armas químicas deja entrever que Estados Unidos se está preparando para la posibilidad de que pueda repetirse la utilización de gases mortíferos.
Las Casa Blanca dijo que la asistencia no letal podría tener tres categorías:
- Equipo de "protección personal" relacionado con armas químicas para organizaciones que trabajan en Siria, incluida la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas.
- Asistencia médica encaminada a fortalecer la capacidad de los sectores que proveen servicios de salud en Siria a fin de que estén preparados y puedan responder a la utilización de este tipo de armamento.
- Adiestramiento defensivo frente a armas químicas y equipo de protección para miembros autorizados de la oposición siria a fin de que puedan guarecerse del uso de gases mortíferos.
Un funcionario de alto rango del gobierno de Obama dijo que la asistencia y adiestramiento no dotará a la oposición siria de la capacidad para preparar, desplegar o maniobrar arsenales de armas químicas. Washington dice creer que el gobierno del presidente sirio Bashar Assad retiene el control de los gases mortíferos.
Estados Unidos había comenzado a hacer planes para enviar asistencia relacionada con armas químicas a Siria antes del ataque del 21 de agosto, dijo el funcionario, que solicitó el anonimato porque no está autorizado a hacer declaraciones sobre el particular.
De acuerdo con un informe de las Naciones Unidas difundido el lunes, hay evidencia de que se utilizó gas sarín en una "escala relativamente grande" durante el ataque del mes pasado. En el informe de la ONU no señala a la parte responsable del ataque, aunque Estados Unidos y decenas de otros países lo atribuyeron al régimen de Assad.
Obama, que ha reiterado que la utilización de armas químicas rebasaría la "línea roja" (el límite) que él había fijado, parecía dispuesto a lanzar una operación militar estadounidense contra Siria en respuesta al ataque con gas sarín.
Sin embargo, modificó su proceder y en su lugar decidió buscar la aprobación del Congreso, donde existe una oposición generalizada a una operación bélica contra Damasco.
Antes de que los legisladores estadounidenses emitieran su voto, Estados Unidos y Rusia concertaron un acuerdo ambicioso en el que se prevé que Siria entregue en una semana un inventario de su programa de armas químicas.
Todos los componentes del programa de armas químicas de Siria serán retirados del país o destruidos para mediados de 2014.
Por mucho tiempo Rusia ha sido uno de los respaldos militares y económicos más firmes de Assad.
La medida fue adoptada casi un mes después de que un mortal ataque con armas químicas cerca de Damasco aumentara la posibilidad de una represalia militar estadounidense y derivara en un acuerdo diplomático para retirarle a Siria sus arsenales de gases mortíferos.
Aunque la Casa Blanca afirma que una respuesta internacional debería disuadir futuros ataques, la autorización de la asistencia relacionada con armas químicas deja entrever que Estados Unidos se está preparando para la posibilidad de que pueda repetirse la utilización de gases mortíferos.
Las Casa Blanca dijo que la asistencia no letal podría tener tres categorías:
- Equipo de "protección personal" relacionado con armas químicas para organizaciones que trabajan en Siria, incluida la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas.
- Asistencia médica encaminada a fortalecer la capacidad de los sectores que proveen servicios de salud en Siria a fin de que estén preparados y puedan responder a la utilización de este tipo de armamento.
- Adiestramiento defensivo frente a armas químicas y equipo de protección para miembros autorizados de la oposición siria a fin de que puedan guarecerse del uso de gases mortíferos.
Un funcionario de alto rango del gobierno de Obama dijo que la asistencia y adiestramiento no dotará a la oposición siria de la capacidad para preparar, desplegar o maniobrar arsenales de armas químicas. Washington dice creer que el gobierno del presidente sirio Bashar Assad retiene el control de los gases mortíferos.
Estados Unidos había comenzado a hacer planes para enviar asistencia relacionada con armas químicas a Siria antes del ataque del 21 de agosto, dijo el funcionario, que solicitó el anonimato porque no está autorizado a hacer declaraciones sobre el particular.
De acuerdo con un informe de las Naciones Unidas difundido el lunes, hay evidencia de que se utilizó gas sarín en una "escala relativamente grande" durante el ataque del mes pasado. En el informe de la ONU no señala a la parte responsable del ataque, aunque Estados Unidos y decenas de otros países lo atribuyeron al régimen de Assad.
Obama, que ha reiterado que la utilización de armas químicas rebasaría la "línea roja" (el límite) que él había fijado, parecía dispuesto a lanzar una operación militar estadounidense contra Siria en respuesta al ataque con gas sarín.
Sin embargo, modificó su proceder y en su lugar decidió buscar la aprobación del Congreso, donde existe una oposición generalizada a una operación bélica contra Damasco.
Antes de que los legisladores estadounidenses emitieran su voto, Estados Unidos y Rusia concertaron un acuerdo ambicioso en el que se prevé que Siria entregue en una semana un inventario de su programa de armas químicas.
Todos los componentes del programa de armas químicas de Siria serán retirados del país o destruidos para mediados de 2014.
Por mucho tiempo Rusia ha sido uno de los respaldos militares y económicos más firmes de Assad.